martes, febrero 20, 2007

Hasta luego

Hola a tod@s.

Como veis, llevo cierto tiempo sin escribir nada en el blog... El motivo de este post es comentaro qeu, si queréis seguir mis andanzas por tierras lejanas, no tenéis más que clicar en www.alvaroencorea.blogspot.com y ahí me podréis encontrar. Eso sí; a partir de mayo, volvemos a tener una cita aquí, en las mejores pantallas, es decir, las vuestras.

Un abrazo,

Atticus

PD: Si la espera se os hace insoportable (:-p!) os recomiendo de nuevo los blogs de Jucasel y Ojalancia, que tenéis linkados en esta misma página. ¡Saludos!

viernes, febrero 02, 2007

En 5 líneas

Ante la pregunta "¿vamos en metro o en bus?" mucha gente contesta: "en autobús, que en el metro no se ven "cosas"". Más allá de las ventajas de ahorro de tiempo, ecológicas,... yo suelo contestar "en metro", pero por otro motivo: muestra el pulso, la verdadera cara de una ciudad.
Barcelona tiene un extraño complejo de Dr. Jekyll y Mr. Hyde en el que la supuesta modernidad más cool&fashion&in&idiota se mezcla con un cierto inmovilismo al que algunos llamarán eufemísticamente "tradicionalismo". Así pues, frente a clásicos como nuestro particular "Fool of the Hill" que lleva años cantando La Traviata en el andén de la estación de la línea 3 de Passeig de Gràcia (paradójicamente, no en la de Liceu) o el entrañable vendedor de cupones del túnel de Sants-Estació ("la suerte para hoy, cupones para hoy, la sueeeeerte para hoy" canta sin cesar), ya tenemos en algunos andenes novísimos monitores que nos bombardean con anuncios y noticias y que no hacen más que calcar el contenido de alguno de los diarios gratuitos que nos acaban de repartir en la boca de acceso (dando un giro más de tuerca al estado de alienación de la mayoría de pasajeros) mientras múltiples estaciones siguen sin estar adaptadas para minusválidos.
La heterogeneidad de nuestra población también está presente en sus vagones, confundiéndose los minúsculos rumores de los turistas orientales que parecen llevar un cartel diciendo "aquí, aquí está mi cartera", con el latido de los ipods de un par de chavales ansiosos por pedir un Sonotone las siguientes Navidades, la exclamación de un norteamericano afirmando "I've seen toilets bigger than this in Arizona" (refiriéndose a la Catedral), la sonrisa cansada de quien regresa victorioso de una jornada más de trabajo, y el brillo en los ojos de quien aun está fresco como una rosa y sale esperanzado a su nueva cita (o vuelve de ella).
Barcelona -¡la Ólímpica!- a su vez, es conocida por ser una importante capital del deporte. Nuestro metro así lo refleja, deleitándonos a diario con auténticas carreras de saltos de vallas en sus entradas (para ser vigilante de metro en Barcelona exigen medir menos de metro sesenta, digo yo), fantásticas clases gratuitas de steps en estaciones como Plaça de Sants, u organizando carreras de medio fondo en el túnel de Passeig de Gràcia (si aun no lo habéis ubicado, supongo que si os digo "el Túnel del Terror", muchos barceloneses diréis, "¡ah, vale!").
Así pues, la Barcelona olímpica, fashion y multicultural se ha ido reflejando en la composición de los viajeros de su metro, mientras que éste ha avanzado mucho más lentamente que su sociedad. Que seamos una de las únicas grandes ciudades europeas que en los últimos veinte años no ha inaugurado ni una nueva línea (salvo el cachito de la 2) resulta intolerable para una metrópolis que aspira a ser un referente, si no mundial, como mínimo europeo o mediterráneo. Lo sucedido con la línea 9 (agujeros abiertos y cerrados, discusiones eternas sobre el trazado, Carmel treu banyes...) es una vergüenza. Otro nuevo toque en los dedos pues, para nuestro Ajuntament.
PD: Ante la pregunta planteada al inicio del post, todavia no conozco a nadie que haya contestado: "En Tram Baix"...