martes, noviembre 15, 2005

Message in a bottle

Ampliando la información publicada en primicia por jucasel y, todavía en prensa, por ojalancia, aporto un valioso documento de incalculable valor que nos aclara las raíces históricas de ciertaos acontecimientos supuestamente casuales. La historia, dicen es cíclica... y ya decía el Arcipreste de Hita en su Libro del Buen Amor:

¡Hay Dios, cuán hermosa viene Doña Endrina por la plaza!
¡Ay, qué talle, qué donaire, qué alto cuello de garza!
¡Qué cabellos, qué boquita, qué color, qué buenandanza!
Con saetas de amor hiere cuando los sus ojos alza.

Pero tal lugar no era para conversar de amores;
acometiéronme luego muchos miedos y temblores,
los mis pies y las mis manos no eran de sí señores,
perdí seso, perdí fuerza, mudáronse mis colores.

Pues bien, Doña Endrina resultó ser un bárbaro nombre en código; Don Melón, apodo de guerra de un hidalgo del Eixample; y el Arcipreste... Rappel. Porque sí señores, acaba de descubrirse el fragmento que seguía en tan magna obra (el episodio de Don Melón y Doña Endrina), y dice así:

Yo te traigo en la mi bolsa un corazón en botella,
poco engorda, riega el caldo y evita la Font Vella.
Mas el sudor ha en mis manos una cruel estratagema,
y mi vida poco a poco se va escurriendo entre ellas.

Va cayendo y buen repaso le voy pegando, ¡bella!
mas el crujir -no de dientes- fue el Rioja de la plebeya,
interrumpe el instante y la baba del mozo congela.
Lluvia roja, "¡Muera Newton!, ¿qué pensará ella?"

"Non fuyades, caballero, no escondáis vuestra pechera,
pues sus cuadros los veía desde Jerez de la Frontera.
Ni lira ni espada, es mi mocho quien espera:
Y la de la botella: quien la tira, va por ella"

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Bien es cierto, buen amigo, que debo ser yo Don Melón - mejor que Don Huevón ,digo -, pues ante tal sutileza, sugiero mi señor, tenga usted la prudencia de mucha atención tomar, no vaya a ser que Doña Edrina sea de su paladar degustar.


Digo que más el hombre, pues otras criaturas
tan sólo en una época se juntan, por natura;
el hombre, en todo tiempo, sin seso y sin mesura,
siempre que quiere y puede hacer esa locura.

Prefiere el fuego estar guardado entre ceniza,
pues antes se consume cuanto más se le atiza;
el hombre, cuando peca, bien ve que se desliza,
mas por naturaleza, en el mal profundiza.

Yo, como soy humano y, por tal, pecador,
sentí por las mujeres, a veces, gran amor.
Que probemos las cosas no siempre es lo peor;
el bien y el mal sabed y escoged lo mejor.


Pues deje le remita cómo sigue al nuevo fragmento Atticus de Hita...

¡No tenga reparo!, Don Melón, se apresura
ella, aguardada por su leal hermosura.
Colorido al parquet me ha obsequiado,
cuando él jamás lo ha limpiado.

Siempre soñé en viñedos, uvas de Macabeo
i Xare.lo, ¡con Riberas del Duero babeo!,
olor con aromas fenólicos por el suelo.
Esto ha sido un regalo caido del cielo. (o de las manos)

Anónimo dijo...

Bien es cierto, buen amigo, que debo ser yo Don Melón - mejor que Don Huevón ,digo -, pues ante tal sutileza, sugiero mi señor, tenga usted la prudencia de mucha atención tomar, no vaya a ser que Doña Edrina sea de su paladar degustar.


Digo que más el hombre, pues otras criaturas
tan sólo en una época se juntan, por natura;
el hombre, en todo tiempo, sin seso y sin mesura,
siempre que quiere y puede hacer esa locura.

Prefiere el fuego estar guardado entre ceniza,
pues antes se consume cuanto más se le atiza;
el hombre, cuando peca, bien ve que se desliza,
mas por naturaleza, en el mal profundiza.

Yo, como soy humano y, por tal, pecador,
sentí por las mujeres, a veces, gran amor.
Que probemos las cosas no siempre es lo peor;
el bien y el mal sabed y escoged lo mejor.


Pues deje le remita cómo sigue al nuevo fragmento Atticus de Hita...

¡No tenga reparo!, Don Melón, se apresura
ella, aguardada por su leal hermosura.
Colorido al parquet me ha obsequiado,
cuando él jamás lo ha limpiado.

Siempre soñé en viñedos, uvas de Macabeo
i Xare.lo, ¡con Riberas del Duero babeo!,
olor con aromas fenólicos por el suelo.
Esto ha sido un regalo caido del cielo. (o de las manos)

jucasel dijo...

Los que somos de cinecias nos quitamos el sombrero o lo que llevara el de Hita en la cabeza.

Ni literatura ni referentes históricos de la noticia han llegado a mis manos ni a mi pantalla via google.

Seguiré instruyendome en blogs más letrados.

Anónimo dijo...

jucasel, Arcipreste pronto recalará en tu weblog para verificar las ocurrencias expuestas en él...

Atticus dijo...

Charlie, has escrito dos veces el mismo comentario... ¿te cargastes dos botellas o te acabas de pimpar ahora una?:-p!
PD: todos llevamos un Don Melón dentro...

Anónimo dijo...

Fallos del directo. Puedes borrar una de las dos. Up to U.